El estadio Hernando Siles quedó enfriado

El plantel atigrado comenzó con todo sobre la portería de Gustavo Almada, recuerdo un remate de Jeyson Chura y otro del juvenil Kuqui; pero inteligentemente la U de Vinto se fue apropiando de  la pelota y le fue complicando al local en su andamiaje.

La U se encargo de destrozar el medio con la presencia de Iván Huayhuata y Juan Pablo Maagallanes, que fueron claves en esa tarea.

La visita empezó a animarse y llegó bien con Maximiliano Núñez, Tommy Tobar y también vi un buen desempeño del juvenil Juan Cuéllar.

La U consiguió el tanto de la apertura en una jugada con balón detenido, fue un balde de agua fría para el Tigre, que perdió la brújula y no aparecían jugadores como Michael Ortega o Bryan Angulo, quien deambulaba en el ataque.

No hacían daño los aurinegros y los vallunos se conformaron con el gol de la ventaja en lugar de buscar el segundo. Al final de la primera parte, en un rápido contragolpe, Ortega llegó al empate y el Tigre clasificaba a la final con ese resultado.

En el complemento, The Strongest inició con mucho empuje, pero con pocas ideas. El partido se cayó porque la U de Vinto sólo se protegió en su sector; sin embargo en la parte final de esta etapa la visita comenzó a vivir cerca del arco del arco de Viscarra y ahí llegó el segundo tanto de Juan Pablo Magallanes.

Lo mejor que le pudo haber ocurrido al Tigre fue ir a la definición por penales, porque nunca mereció clasificarse a la final en los 90 minutos.

En los disparos desde el punto penal, la U de Vinto fue más efectivo, sólo falló un jugador y tuvo en el arquero Gustavo Almada a la gran figura al atajarle el penal a Viscarra, que por muchos partidos fue el héroe de su equipo, pero falló en su remate.

El estadio Hernando Siles quedó enfriado con el último disparo de Pinto, no era para menos ya que se viene una final inédita por tres millones de dólares, que varios clubes grandes desperdiciaron la oportunidad de ganar para sus arcas.